Las estafas y «cuentos del tío» que incluyen pornoextorsiones y engaños con perfiles falsos que tienen varios relatos para captar efectivo en la calle o vaciar cuentas corrientes de home banking, es una modalidad que está en crecimiento en el país.
Lo llamativo de esto es que los que cometen estas estafas son presos jóvenes, muchos ni siquiera con su primera condena, todavía a la espera de un juicio oral o un veredicto.
Se trata de una modalidad que proliferó en los últimos meses, en medio de un auge general de los engaños delictivos y extorsiones que generan plata fácil para los delincuentes, con víctimas como la que pasó el folclorista santiagueño Peteco Carabajal.
La noticia que involucró al músico bandeño fue noticia nacional, cuando a mediados de julio, denunció en la Justicia de Moreno fue contactado a través de Facebook por una joven supuestamente llamada Carolina Gómez y en apariencia mayor de edad, según su foto de perfil.
Todo comenzó cuando Peteco comenzó a intercambiar mensajes de texto con la mujer y entró en confianza, hasta que en un momento de la charla ella le envió fotos íntimas.
Al día siguiente -según lo cuenta en detalles Infobae-, el cantante santiagueño recibió una llamada en su teléfono. Era un hombre que se identificó como Ricardo Gutiérrez y que decía pertenecer a la brigada de ciberdelitos de la Policía Bonaerense.
Esta persona le manifestó a Peteco que habían detectado actividad inusual en su red social y que “estaba siendo investigado por corrupción de menores”, informaron fuentes policiales, dando a entender que la joven con quien había intercambiado mensajes era menor de edad.
En la comunicación, el presunto policía le hizo una propuesta a la víctima. “Le pidió que le deposite por una suma total de $100.000 pesos a una cuenta bancaria a nombre de una mujer, Malena Soledad Bustamante”, aseguraron fuentes del caos.
Así, comenzó una investigación a cargo de la fiscal Luisa Pontecorvo, que llegó hasta la Unidad N°39 del Servicio Penitenciario Bonaerense en Ituzaingó. Allí notificaron a Pedro Alejandro Godoy Fuentes, ciudadano chileno de 27 años, que ya estaba detenido en el marco de una causa que lleva adelante el Tribunal Oral Criminal Nº 5 de Morón por portación ilegal de arma de fuego de uso civil, violación de domicilio y encubrimiento simple. Otro cómplice fue arrestado en la zona, Maximiliano Ezequiel Pereyra por la pornoextorsión a Peteco Carabajal (ver foto).
Delitos que crecen
Según datos de la Asociación Argentina de Lucha Contra el Cibercrimen (AALCC), los delitos de sextorsión vienen en constante aumento desde hace cinco años. En 2016 se registraron 49 hechos.
En cambio, el año pasado hubo 151 denuncias en todo el país, lo que significa un incremento del 208% que los presos delincan con celulares no es nuevo.
Los secuestros y engaños virtuales a jubilados para robarles los dólares bajo el colchón, tampoco: se agudizaron en la pandemia, protagonizados con particular violencia por bandas de personas que pertenecen a la comunidad gitana.
Las nuevas historias son variadas. Pueden, por ejemplo, enviar una mujer para chatear con un anzuelo sexual para luego asegurar que esa mujer es una menor, y que la víctima, a menos que pague, tendrá una causa en su contra.