El Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci) determinó que en junio una familia de cuatro integrantes (dos adultos y dos menores) precisó $63.300 para no ser considerada pobre y $25.500 para no ser indigente.

 

La medición surge del relevamiento mensual de precios de las Canastas Básicas realizado por el Índice Barrial de Precios (IBP) en 285 negocios de 53 barrios de la capital santiagueña y 115 comercios de 23 barrios de la Banda.

 

“En el mes de junio una familia conformada por dos adultos y dos niños precisó $60.294,58 (CBT) para cubrir sus necesidades básicas (transporte, salud, vestimenta, educación y otros gastos) y no encontrarse por debajo de la línea de pobreza. En junio del año anterior (2020) necesitó $40.710,64 para las mismas compras. Lo que significa un aumento interanual aproximadamente del 48,10%”, especifica el informe. Esto implica que la misma familia necesitó aumentar sus ingresos en $20.000 de un año a otro sólo para mantener su nivel de consumo más básico y no ser considerada pobre.

En cuanto a la Canasta Básica de alimentos (CBA), que marca la línea de ingencia con la compra de los productos esenciales, “el mismo grupo familiar en junio precisó $ 25,440.75 para no encontrarse en la indigencia. En junio del año anterior (2020) necesitó $ 16.616,59 lo que demuestra un aumento interanual del 53.10%”. En ese caso son $10.000 pesos más con respecto al año pasado.

La directora de Isepci, Alejandra Monjes Rosales, precisó que “nuevamente el rubro almacén volvió a encabezar los aumentos mensuales en un 3,3% lo que llevó a que una familia necesite este mes $ 12.160,49 para afrontar su costo”.

Los cinco productos de consumo básico que más subieron fueron el Galletitas saladas (1kg) 21.20%, café (500 gr) 13.33%, manteca (100 gr) 12.50%, Queso cuartirolo (1 kg) 8.50% y Puré de tomates (520 gr) 8.33%.

 

En segundo lugar, dentro de la tendencia ascendente de la Canasta Básica se ubica este mes el rubro de verdulería que subió un 0.63% haciéndose necesaria la suma de $ 4.028,87 para afrontar su costo. En donde se destaca la suba del kilo de tomate de un 25%.

 

En tercer lugar, por primera vez en lo que va del año tenemos al rubro carnicería para el cual se precisó $9.221,39 para afrontar su costo mínimo.

 

“Pero analizando el primer semestre del año su evolución interanual, ha sido el rubro que se ha destacado por su alza, deteriorando el poder adquisitivo de los sectores populares, es decir que para junio de este año (2021) los costos de este rubro fue un 75,13% más altos que los del año pasado”, indicó Monjes Rosales.

 

Los 5 cortes que más aumentaron fueron: el espinazo con un 133.33%; la carne picada con un 93.55%; la nalga con el 87.50%; el asado con un 77.27%; y, por último, la paleta con el 73,68%. En relación a la variación mensual, el mayor incremento se vio plasmado en el valor del Espinazo con una suba del 12 % seguido por el hígado con el 9,9% y la paleta con el 1,54 %.

 

Los precios en los alimentos tuvieron aumentos en su variación mensual de 1,62% en la Canasta básica total (CBT) y en la Canasta básica de alimentos (CBA).

 

La titular del Icepsi concluyó que “se cierra el primer semestre del año con la tendencia sostenida de incrementos permanentes en los productos de las Canastas Básicas que golpean el presupuesto de toda la población, y especialmente sobre los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”.