El 4 de abril de 2016 murió de un balazo Sergio Gabriel Roldán, un estudiante secundario del barrio Jorge Newbery, que en pocos días iba a cumplir 18 años. El hecho ocurrió en la nueva costanera de Capital, en circunstancias confusas, pero su familia no duda que se trató de un homicidio. La causa tiene tres imputados, entre ellos una ciudadana española, pero se encuentran libres.

Por este episodio que tuvo trascendencia mediática fueron detenidos Sergio Campos, Guillermo Silva y Antonella Nerea Kloner, esta última fue detenida en un hotel de Buenos Aires, después de haber permanecido prófuga varios meses. Estuvieron detenidos unos 3 meses y luego recuperaron la libertad. Al expediente lo comenzó a instruir la exjueza Lucrecia Martínez Llanos, que fue destituida y recientemente condenada por el escándalo de cautelares que incautaron fondos del gobierno de Tucumán, y posterioremente pasó a Cecilia Vittar. La causa se paralizó totalmente con la pandemia.

 

“Uno de ellos, Campos, lo llamó a él para que fueran a unas picadas. Mi hijo me mostró el mensaje y me dijo que lo conocía a través de un amigo y compañero del colegio, de apellido Silva. Él tenía una fiesta con otros chicos y le insistía. Campos es quien lo asesinó y le hizo la cama para que vaya. Le tenía bronca porque su exmujer salía con mi hijo, aunque él ya tenía otra mujer. Lo que me dijeron es que ella negó que fuera el padre de su hijo y por eso le agarró bronca a Sergio y se vengó. Eso comentó la mujer del asesino”.

 

Mario Roldán agregó que Guillermo Silva lo buscó a su hijo y se encontraron en la rotonda de Santa Rita con Campos, quien manejaba un automóvil, para dirigirse al Parque Aguirre. “Pasaron por el barrio Aeropuerto para buscar a la española (Kloner) y Campos le preguntó si ‘traía el fierro’, por lo que tuvo que volver a buscar un revólver. Subió al auto y se fueron al Parque. Empezaron con que tiene o no tiene balas, si anda o no, y ahí no sé qué pasó y recibió un disparo mientras se encontraba en el asiento del acompañante. Manejaba Campos y atrás estaban la española y Silva.

“Yo sé por declaraciones que Campos ya había andado amenazando a mi hijo porque supuestamente salía con la exmujer. Algo de eso hay”, señaló.

 

Roldán recordó que fue a la comisaría a hablar con Guillermo Silva y él me me dijo que “cuando se le escapa el tiro en la costanera, Campos quería tirarlo al río. Este chico lloraba y lo abrazó a mi hijo, no lo permitió. Y lo metieron en el auto y lo llevaron al hospital. Después vinieron a avisarme que Sergio había tenido un accidente y cuando les pregunté me dijeron que habían venido unos chorros encapuchados pasaron junto a ellos e hicieron un disparo. Después la policía los hizo hablar y no era así: ellos eran los verdaderos asesinos”. Mientras tanto, Kloner fue a su casa a buscar sus pertenencias y se escapó de la provincia hasta que la capturaron, pero se le concedió arresto domiciliario por ser madre de menores.

 

La propia familia de la víctima se enteró que Kloner había vuelto a la provincia y se encontraba bailando en un boliche. Roldán fue con la policía y la capturaron. Se había teñido el cabello para no ser reconocida y se ocultaba en el barrio Cáceres.

Guillermo Silva da su versión a la jueza Cecilia Vittar, durante la reconstrucción (foto El Liberal).

Roldán señaló que la reconstrucción se hizo en la vieja Terminal de Ómnibus, no en la Costanera donde ocurrieron los hechos. “Cuando la fiscal le preguntaba (a la española) de dónde habían sacado el arma decía que la habían encontrado (en un bolso abandonado a la orilla del río); se tiraban la pelota entre ellos, ella lloraba”, recordó el padre de Sergio. Kloner dijo que había tirado el arma en una zona descampada, pero nunca pudo ser encontrada. El trío coincidió en que Silva apuntó con el arma a la cabeza de Roldán y gatillo varias veces hasta que salió el disparo. Silva era menor en ese momento, por lo que de ser hallado culpable recibiría una pena menor. La familia de la víctima cree que el autor es Campos, y que se trató de un homicidio premeditado.

 

“Ellos están libres y c… de risa”, comentó indignado Roldán. Su esposa agregó que “Guillermo Silva nos amenaza cuando pasamos o a mi hijo le dice que le va a pasar lo mismo”.